‘El Método Knox’: Michael Keaton al frente de una carrera a contrarreloj

Michael Keaton dirige y protagoniza ‘El método Knox’, una película de acción donde comparte escenas con el mismísimo Al Pacino.

John Knox es un asesino a sueldo al que le diagnostican una demencia en estado avanzado. Su personaje no es nada fácil de llevar, pues su oficio le ha hecho separarse de su familia y lo único sólido que tiene en su vida es su capacidad para salir airoso de peleas contra matones. 

Miles Knox, su hijo del que no sabe nada desde hace tiempo, regresa a su vida para exigirle ayuda como compensación de todo el daño que le ha hecho. John, desde su frialdad como asesino, pero comprensivo como un padre, decide ayudarle sin importarle las consecuencias.

Pero ¿el fin justifica los medios? Porque el personaje de Michael Keaton tiene claro que sí y la manera en la que elabora los actos de su personaje consigue hasta que le defendamos.

Es una película con una idea muy madura que conllevan unos actos muy fríos, pero con un fondo que abraza corazones y reconcilia relaciones olvidadas. 

‘El método Knox’ es una carrera a contrarreloj antes de que su enfermedad termine de incapacitarle y no pueda finalizar la misión que prometió a su hijo, esa misión que le permitirá perdonarse a sí mismo de sus errores del pasado.

Escenas violentas muy bien rodadas, una trama estable y un Al Pacino como apoyo incondicional son todo lo que necesitaba Keaton para que su película fuera buena. 

‘El método Knox’ se agarra a un final que da sentido a todo y nos hace comprender que tenía todo bajo su control y era el único método que le llevaría al éxito.