En ‘Broker’ encontramos una road movie enternecedora que comienza contándonos la habitual práctica del abandono de bebés que se vive en Corea del Sur desde hace años, el denominado baby box: centros de acogida para los hijos no deseados. Un tema social tan complicado que se consigue tratar con suma delicadeza gracias a una narración tan íntima y unos personajes muy bien cuidados que representan muchas de las cuestiones que ensombrecen la sociedad: madres al límite, diferencia en las clases sociales y la normalización en la trata de seres humanos.
Su director, el cineasta japonés Hirokazu Koreeda, encaja cada una de sus obras con claro sentimentalismo mostrado a través de una mirada reflexiva sobre los problemas que las acontecen. Sus cintas conservan un denominador común: el valor de la familia. ‘Broker’ no iba a ser menos, pero esta vez lo hace demostrando que la unión familiar no precisa únicamente de lazos sanguíneos. Uniendo a sus integrantes por un beneficio común que evoluciona hasta encontrar su lado más humano.


