Hoy llega a Disney+ ‘Star Wars: Crónicas del Submundo’, el regalo perfecto para los fans de la saga en este Día Internacional de Star Wars. La serie de cortos animados comenzó en 2022 con ‘Star Wars: Las crónicas Jedi’ y continuó en 2024 con ‘Star Wars: Crónicas del Imperio’. Esta vez se centra en el lado más oscuro del crimen de la galaxia a través de los ojos de dos icónicos villanos.
En la primera parte de la serie de seis episodios seguimos el rastro de Asajj Ventress, asesina personal del Conde Dooku y posterior cazarrecompensas, cuyos pasos se ven acompañados por los de Lyco Strata, un joven Padawan superviviente de la Orden 66. A pesar de ser dos personajes de ideales completamente contrarios, consiguen esa unión que los Sith y los Jedi nunca tuvieron.
Asajj Ventress iba a haber sido la villana principal del Episodio II, pues su relación con el Conde Dooku hizo tambalear su destino hasta verse arrastrada a las Guerras Clon. Aunque ‘Star Wars: Crónicas del Submundo’ no cuente toda su historia, sí le ha servido para darse un paseo por la galaxia y dar a conocer aquella parte no tan destacada en su biografía, pero importante para conocer su naturaleza protagonizando así un viaje lleno de acción y peleas de sable con coreografías muy propias de aquellos tiempos donde la Fuerza era algo más que aquel mito en el que se convirtió.
La segunda historia está encabezada por Cad Bane, uno de los cazarrecompensas más duros y temidos de la galaxia durante las Guerras Clon. Apenas conocíamos su historia salvo por algunas apariciones en proyectos como ‘El Libro de Boba Fett’, la serie de animación ‘Star Wars: The Clone Wars’ y su spin-off ‘The Bad Batch’. Cameos simbólicos que reforzaban esas historias gracias a su simple presencia, pero que, a día de hoy, resulta inexplicable su poca interacción en la saga a pesar de ser uno de sus personajes más potentes. Es por ello que ‘Star Wars: Crónicas del Submundo’ se convierte en el espacio perfecto que Cad Bane merecía para contar su origen de villano.
Para entender su origen, que se demora años en hacerse efectivo y cuyos antecedentes no justifican su crueldad, debemos conocer a dos amigos inseparables que se ven obligados a dividir sus caminos después de haber encontrado ayuda de quien no debían atraídos por la idea de vivir bien. Cada uno sigue desarrollándose en su propio destino hasta que terminan situados en los lados opuestos de la Fuerza, creando así una mayor discordia entre aquellos amigos que un día fueron hermanos.
Y es aquí cuando ‘Star Wars: Crónicas del Submundo’ se convierte en el viejo oeste a pesar de los elementos futuristas que lo rodean. Pero el escenario que se consigue, como ya ocurría con ese tono western que ofrecía ‘The Mandalorian’, es lo que le da brillo a esa segunda mitad de la serie consiguiendo una atmósfera que, además, determina la identidad de Cad Bane.
‘Star Wars: Crónicas del Submundo’ se está empezando a convertir en un imprescindible de las series de Star Wars porque ayudan a conocer esa parte hasta ahora oculta o poco explorada del universo. Además, es como si la Fuerza de este Submundo que se nos presenta hubiera tornado al Lado Oscuro y no tuviera ninguna deuda con los buenos, dejando todo el éxito a los villanos.
Gracias a su increíble banda sonora y a las míticas transiciones de planos que se introdujeron en la trilogía original, se siente parte de este universo y reafirma la idea de canonizar todas estas series de animación cuyas historias no pasan nunca desapercibidas y se atreven siempre con lo más inexplorado. No hay producción de Dave Filoni que no tenga alma y pasión y consigan llevar al universo de Star Wars a un nuevo nivel.
Como ya comentaba en nuestra reseña de la segunda temporada de ‘Andor’, se consolida la idea de que Star Wars se permite el lujo de estrenar varias series al año, en forma de live-action o de animación, planteadas en puntos distintos de su línea temporal y no se sienten inconexas ni cuesta identificar su lugar en su cronología, y eso es una fórmula que ninguna Estrella de la Muerte es capaz de destruir.