‘Good boy’: No es la del perro, pero guau

‘Good Boy’ es raro, incómodo y, sin embargo, imposible de dejar de mirar. Tommy, 19 años, delincuente, es secuestrado por una pareja disfuncional que cree que puede arreglarlo y moldearlo a su imagen de “buen chico”. Lo que sigue es un juego extraño de poder, manipulación y vulnerabilidad donde cada intento de corregirlo se convierte en una escena de tensión absurda y aterradora a la vez.

El tono es inestable. Humor incómodo cuando debería darte mal rollo. Momentos que te hacen reír por lo absurdo y otros que te encogen el estómago. La película gira entre la comedia negra y un retrato de maltrato psicológico, como si alguien hubiera mezclado un experimento social con un drama familiar enloquecido. Tommy se convierte en un peón, en un vacío que la familia intenta llenar. La película crea esa sensación de círculo vicioso: nada cambia, el abuso persiste, y el protagonista sigue atrapado en un sistema que no le pertenece, en un mundo que lo observa con indiferencia.

Las escenas son inquietantes: vandalismo, control extremo, aprender a la fuerza, y un síndrome de Estocolmo que crece poco a poco. Es un retrato despiadado de familias disfuncionales, del delirio de grandeza del hombre blanco y de un abuso que se repite en bucle. Todo esto se combina con actuaciones magistrales. Stephen Graham es un camaleón, inquietante, fascinante y capaz de transmitir incomodidad con la mínima expresión.

Probablemente sea la película que mejor refleja el maltrato que he visto en pantalla, y lo hace con humor, incomodidad y un tono que, sinceramente, debería ser aún más oscuro de lo que es. La sensación de estar frente a algo perturbador y a la vez extrañamente divertido permanece hasta después de los créditos.

‘Good Boy’ es incómoda, perturbadora y extrañamente divertida. Una historia de secuestro, manipulación y disfunción familiar que te hace cuestionarte constantemente: ¿quién es la víctima realmente? Y, sobre todo, ¿hasta dónde puede llegar alguien para intentar reemplazar lo que le falta en su vida?