‘A different man’: más allá de todo aquello que promete ser diferente

No hay personaje que A24 no sea capaz de profundizar en su naturaleza y, aunque nos ofrezca la parte más controversial de la misma, nos propone seguir aceptándola. ‘A different man’ sigue a Edward Lemuel, un actor que lucha contra la neurofibromatosis, un trastorno genético que causa el crecimiento de tumores en los nervios y pueden causar deformidades físicas. Edward decide recibir un tratamiento médico experimental que lo cure de su condición.

‘A different man’ se mueve entre lo surrealista, lo incómodo y, en ocasiones, lo gracioso. El guion y la historia tan bien planteada de Edward facilita sin duda el gran trabajo de Sebastian Stan para meterse en su piel y salir de ella creyéndose liberado por fuera, aunque por dentro siguiera atado a una vida que amenaza con dejar de pertenecerle.

Mientras veía la cinta, me venían a la cabeza las imágenes de ‘La Sustancia’, y no por las escenas desagradables, ya que en ‘A different man’ en ningún momento se muestra la enfermedad como tal más que como una supuesta limitación para encajar en la sociedad, si no por el sentimiento de comodidad con uno mismo sabiendo que se posee un aspecto físico normativo. 

Y es que ‘A different man’ tiene lo que a ‘La Sustancia’ le faltó por mostrar, ese día a día aceptando su nuevo aspecto y cómo el entorno es lo que realmente te hace sentir o no a gusto. Ese equilibrio entre gustar por cómo eres por fuera y cómo eres por dentro. Y aunque Edward decida cambiar de nombre y “matar” a su antiguo yo, nunca debió olvidarse de quién era.

Como A24 acostumbra, no bastan más que 3 escenarios y pocos personajes para contar una sólida historia capaz de conmover plagado de escenas que dicen poco, pero significa mucho, como una simple escena de bar donde Edward calla mientras sus acompañantes conversan y su cara poco a poco cambia a medida que intuye que por dentro hay un ápice de cambio. 

‘A different man’ es una película distinta, no creo que arriesgada, pero capaz de no dejar indiferente a nadie.